Que visitar en República Checa

Praga – Karlovy Vary – Kutna hora

Praga

En Praga, los sueños se mezclan con la realidad y los visitantes se convierten en parte de su historia.

foto aerea nocturna de praga

Praga, la capital de la República Checa, es un poema urbano escrito en piedra y cristal, un lugar donde los siglos se entrelazan para formar un tapiz mágico de historia, cultura y misterio. Conocida como “La ciudad de las cien torres”, su belleza cautivadora y su atmósfera romántica la convierten en un destino que parece salido de un cuento de hadas.

Karlovy Vary

Balneario más famosas del mundo

foto de la ciudad Karlovy Vary

Kutná Hora

Rincón de las minas de plata

Explore the historic St. Barbara's Church and Jesuit College in Kutna Hora, Czechia.

Kutná Hora, una joya histórica en el corazón del país, es famosa por su rica herencia minera y su fascinante patrimonio arquitectónico. En la Edad Media, fue un próspero centro de extracción de plata, que no solo contribuyó enormemente a la economía del país, sino que también dejó un legado perdurable en sus calles y monumentos. Esta ciudad, que alguna vez rivalizó en importancia con Praga, es conocida como el “rincón de las minas de plata” debido a sus extensos y ricos yacimientos de este metal precioso. Uno de los lugares más emblemáticos de Kutná Hora es el Osario de Sedlec, una capilla única situada en el cementerio del Monasterio de Sedlec, en las afueras de la ciudad.

Pilsen

Aquí, la vida tiene el aroma del lúpulo y el tiempo parece pausarse en cada espuma que corona una jarra.

foto de la ciudad Pilsen

Pilsen (Plzeň) es una ciudad vibrante ubicada en la región de Bohemia. Es la cuarta ciudad más grande del país y está conocida internacionalmente por ser la cuna de la famosa cerveza Pilsner Urquell, que nació en 1842. Además de su rica tradición cervecera, Pilsen ofrece una excelente combinación de historia, cultura y arquitectura. Pilsen no solo es conocida por su cerveza, sino también por su arquitectura, museos y su atmósfera acogedora, lo que la convierte en un destino perfecto para turistas interesados en la historia, la cultura y la gastronomía checa.